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Beatificación de Juan Pablo II: La vigilia en el Circo Máximo y la "Noche Blanca"

Ciudad del Vaticano (Sábado, 30-04-2011, Gaudium Press) Nada mejor para servir de marco introductorio a la beatificación del Papa que vino del Este, que la vigilia que se desarrollará esta noche en Roma, en el Circo Máximo. Todos los ‘ingredientes' para hacer de esta una jornada memorable, estarán en la mesa. Será una vigilia y una noche "blanca". Veamos.

A las 20 horas locales iniciará la jornada, en ese que era centro de diversión de la antigua Roma desde la época de los reyes etruscos, con una puesta en escena de imágenes de Juan Pablo II, acompañadas de sus palabras y gestos, haciendo su memoria.

De la realidad virtual se pasará a los relatos conmovedores de testigos que vivieron el día a día del Papa polaco: El del que fue su secretario privado de toda la vida, el Cardenal Stanislaw Dziwisz; el del portavoz de gran parte de su pontificado, Joaquín Navarro Valls. También narrará su experiencia íntima con el Papa polaco la Hermana Marie Simon-Pierre, religiosa francesa que debe su milagrosa y fulminante curación del Mal de Parkinson a la intercesión de Karol Wojtila. Varios jóvenes también participarán de estas narraciones.

Después serán rezados los Misterios Luminosos del Rosario, aquellos introducidos por Juan Pablo II, quien, en un momento de alta inspiración, quiso que la inmortal y más difundida devoción mariana se viera también impregnada de los maravillosos hechos de la vida del Salvador, ubicados entre el regreso al seno de su hogar tras la ‘pérdida' del Templo y el inicio de su camino de dolor.

Este rezo de los misterios del Rosario tendrán un carácter de oración global: A los reunidos en la vigilia en Roma se unirán los devotos del Santuario de Lagniewniki, en Cracovia; de Kawekamo, en Tanzania; de Notre-Dame del Líbano, en el Líbano; de la patrona de América, Nuestra Señora de Guadalupe, en Mexico; y de una de las advocaciones más queridas por el Pontífice beato, la de Nuestra Señora de Fátima, en Portugal.

Las meditaciones de los misterios luminosos que vivirán personas todos estos lugares de la Tierra, serán precedidas y ambientadas por una intervención del Cardenal vicario para la diócesis de Roma, Mons. Agostino Vallini, quien hablará de la espiritualidad de Juan Pablo II. Al final el Papa reinante, el dulce Cristo en la tierra -quien acompañará todo el acto desde su Palacio Apostólico- rezará la oración final e impartirá la bendición.

Se tiene previsto que la vigilia dure dos horas treinta. Pero tras ella vendrá, para quienes así lo deseen, la "noche blanca", como blanco es el traje talar de los Papas. Ocho importantes iglesias del centro de Roma permanecerán con sus puertas abiertas para acoger las oraciones de los propios y visitantes (Santa Anastasia, San Bartolomé all'isola, Santa Inés en Agonía en la Plaza Navona, San Marcos en el Campidoglio, el Santo Nombre de Jesús en Argentina, Santa María in Vallicella, San Andrés della Valle y San Juan Fiorentini).

Los jóvenes romanos darán un lustre propio a la jornada. Muchos de ellos estarán acogiendo y guiando a los peregrinos hacia las iglesias, y si es del caso, haciendo de catequistas también.

Todo rumbo a la ceremonia de beatificación, el domingo, que dará inicio en la Plaza de San Pedro a las 10:00 am, la que probablemente se constituirá como la ceremonia de Iglesia más asistida en Roma en toda su historia.

Gaudium Press / Saúl Castiblanco